Hace unos meses estaba esperando a entrar al despacho de un exitoso empresario del mundo del retail. Es un despacho de paredes de cristal en medio de la oficinas centrales de la empresa, ya son más de 1.000 trabajadores.
Él estaba sentado en un mesa redonda con un trabajador y tenía pinta de que no era nada importante. Gesticulaba mucho, y de vez en cuando el trabajador se reía a carcajadas. Tras 10 minutos se daban la mano y el trabajador salía del despacho.
-Miguel Ángel, yo no me voy a casa sin resolver un conflicto con un trabajador, eso es una cagada. No me gusta porque yo me voy a casa dándole vueltas y lo que es peor, el trabajador también-
En el libro “la naturaleza de los conflictos intratables”, Cristopher Mitchell define conflicto como “una lucha entre dos o más partes por bienes que se perciben escasos y/o intereses que se asumen como incompatibles e irreconciliables”
Es verdad, creo que es fundamental resolver los conflictos con los trabajadores y que no queden latentes. En casi todas las teorías de conflictos que conozco una de las fases suele ser la “fase latente”. Me gusta especialmente esta fase porque es en la que las partes se comen más la cabeza, es en la que se dan los llamados diálogos internos.
¿Te reconoces a ti mismo solo en el coche, cuando estás dándole una lección tremenda a ese que te ha dicho tal cosa o tal otra…? ¡Ahí eres bueno contestando! ¿eh?
Sobre los diálogos internos me hago varias preguntas:
- ¿Cómo te tratas a ti mismo en esos diálogos?
- ¿Son pensamientos positivos o negativos?
- ¿Sabes controlar tus diálogos internos?
- ¿Puedes cortar esos diálogos?
Es clave controlar esos diálogos para ser un buen “resolvedor” de conflictos.
Imaginaros que fuéramos capaces de escuchar los diálogos internos de los trabajadores o de los jefes ¿sería mucho más fácil resolver los conflictos o por el contrario preferirías no saberlos?
A este empresario del que hablo le da igual no escucharlos, automáticamente los pregunta. Tiene clara una cosa, cuantos más conflictos resuelva al día mejor le va a su empresa. Las empresas que saben resolver conflictos y además resuelven muchos suelen ir muy bien.
La naturaleza de las empresas está en resolver conflictos:
- A través de la generación de un producto o servicio que resuelve conflictos de sus clientes
- Pagando a sus proveedores
- Organizando un proceso o automatizándolo
- Trasladando las expectativas que tiene de sus trabajadores
- …y así un montón de conflictos
EMPRESAS CON PERSONAS QUE SABEN RESOLVER CONFLICTOS = EMPRESAS QUE LO PETAN